Se dicen muchas cosas en el campo de la alimentación, como que la leche es imprescindible en cualquier dieta , que se puede comer de todo moderadamente o que el azúcar es necesario para el funcionamiento cerebral. ¿Qué hay de cierto en estos 3 mitos gastronómicos?
Empezando por el primero, los expertos indican que la aportación de calcio, vitamina D y microproteínas necesarias para una vida saludable, no necesariamente debe proceder de la leche. Si te gusta y no padeces ningún tipo de intolerancia a la lactosa o a las proteínas que contiene, puedes disfrutar de éste como de cualquier otro alimento. En caso contrario, siempre tienes opciones igualmente válidas.
En cuanto a la alimentación variada que deja espacio para todo tipo de alimentos, en realidad, debería ser menos permisiva y evitar algunos productos como los ultraprocesados ya que contienen elevadas dosis de azúcar, aceites refinados, sal y aditivos. Igualmente las carnes procesadas y rojas deberían ser limitadas ya que un consumo excesivo parece estar relacionado con varios tipos de cáncer. ¿Comer de todo? sí pero no…
Si en su día se creía que el azúcar, consumido con moderación, era crucial para el cerebro hoy en día se afirma que su impacto sobre la salud es más bien perjudicial. Es decir, la energía que necesitamos para un correcto funcionamiento cerebral puede obtenerse y sintetizarse por otros medios mucho más sanos y que no constituyen una causa de obesidad, problemas dentales, riesgo de padecer diabetes tipo 2…
En definitiva, no hay que creerse todo lo que sugiere la sabiduría popular. Contrastar es la mejor forma de acertar con nuestras elecciones, no vaya a ser que pensando en asegurar una dieta beneficiosa para la salud estemos, realmente, poniéndola en riesgo.
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