SIROPE DE ÁGAVE: ¿LA PANACEA?

El sirope de agave es un jugo vegetal dulce que se extrae de la savia de la penca del agave,  planta que crece sobre todo en México y que actualmente se encuentra en todas las regiones cálidas y secas así como en los países mediterráneos. A esta planta, muy parecida a la vista al aloe vera,  se la conocía sobre todo por ser el componente principal del tequila pero ha incrementado su fama gracias al sirope que hoy en día se encuentra en una gran cantidad de tiendas de herbodietética y de dietética natural como endulzante.

Cuando la planta alcanza los diez años, se le retiran las hojas para extraer el corazón que puede alcanzar un peso de entre 25 y 75 kgs y con forma de piña grande. La savia de la primera extracción se conoce comoaguamiel (bebida refrescante que toman los nativos), después se fermenta y se obtiene el pulque (bebida alcohólica de antigua tradición mexicana). Finalmente, y explicado brevemente, el jugo se calienta o trata por vía enzimática, se filtra y se concentra por aplicación de calor hasta obtener la textura del sirope o miel de agave, de intenso sabor dulce. De hecho, se estima que tiene el doble de poder edulcorante que el azúcar común, por lo que es considerado un gran potenciador del sabor y del aroma.

No significa que contenga menos calorías y tampoco que su consumo no acarree picos de glucemia en sangre porque todo depende del proceso de elaboración. De hecho, su índice glucémico puede variar de 55 (como espaguetis cocidos) a 90 (como el azúcar blanco). Tampoco implica que ofrezca los beneficios del elevado nivel de fructanos que contiene (un tipo de fructooligosacáridos con función prebiótica a las que se atribuyen beneficios para la salud intestinal) puesto que estos  experimentan un proceso de hidrolización en su elaboración.

Y entonces, qué tiene de especial?

En realidad es una alternativa interesante y saludable al azúcar refinado como pueden serlo el jarabe de arce, al azúcar de cereales, el jarabe de maíz o arroz, la melaza, los jugos de frutas y el azúcar integral no refinado o de panela. Sin embargo tiene la ventaja de que, bajo un consumo moderado y responsable, su poder edulcorante (mayor que el del azúcar) permite utilizar menos cantidad para lograr el mismo dulzor. Además, según el Departamento de Bioquímica de la Universidad Virginia Tech, en Estados Unidos, la sustitución del azúcar refinado  por estas alternativas naturales (aunque también procesadas) podría incrementar la ingesta de antioxidantes de lo cual se beneficiaría nuestro organismo (resultados publicados en la revista oficial de la Asociación Americana de Dietistas JADA). Eso sí, el nivel de antioxidantes varía dependiendo de la opción que elijamos.

La verdad es que ningún edulcorante es bueno si se consume en exceso pero eso no supone que no podamos, con precaución,  disfrutar de las bondades y de todo el sabor de alternativas al azúcar refinado como el sirope de agave. En la repostería de URRUTIA encontrarás algunas delicias elaboradas con este jugo de cultivo ecológico como nuestras magdalenas o bizcocho de avena con sirope eco.

Si la vida no es dulce, recuerda que puedes endulzarla tú mismo.

Fuentes: consumer.es/ saludbienestarnutricion.com/ directoalpaladar
Imagen: Pixabay
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