Hemos leído un interesante artículo sobre la compleja relación entre la comida y las emociones. Un análisis que muestra que la alimentación no solo se convierte en un canal de expresión de negatividad sino también de mucha energía positiva. Y de tanto amor.
No hay duda de que cuando el estrés aprieta podemos experimentar una cierta tentación (más o menos poderosa) de atracar la nevera. Pero, de igual forma, cuando queremos agasajar a alguien y demostrar que es importante para nosotros, buscamos preparar algún que otro refrigerio que exprese ese cariño. Pasteles de aniversario, bombones, desayunos especiales y completos, meriendas caprichosas, cenas románticas…los ejemplos son infinitos.
Y lo curioso es que en Casa Urrutia nos sucede lo mismo. Todo nuestro repertorio de platos y dulces está inspirado en el deseo de satisfacer y mimar a cada uno de los clientes que se acercan a degustar nuestro Menú o que visitan nuestra Agrotienda y Obrador. Seleccionamos cuidadosamente la procedencia y calidad de nuestros productos así como la elaboración artesanal y presentación de nuestros platos y dulces para ofrecer una experiencia culinaria acogedora, sana y sabrosa.
En ellos vertimos toda nuestra dedicación y esfuerzos y, en definitiva, nuestro amor, que como bien decía Antoine de Saint-Exupery, «es lo único que crece cuando se reparte».
Será por eso que en Casa Urrutia crecemos cada día contigo.
GRACIAS.