Mezcla de leche, harina de avena, bayas frescas. Este fue el descubrimiento del doctor Bircher-Benner a raíz de uno de sus paseos por los Alpes donde, por casualidad, conoció a un pastor que se alimentaba a base de cereales, lácteos y frutas de la zona. Tras diferentes investigaciones, el doctor lo introdujo en los regímenes de su clínica como base de la alimentación de sus pacientes. Y de ahí se propagó al resto del mundo.
En la actualidad se consume de muy distintas formas aunque es necesario tomar precauciones para evitar los productos enriquecidos con azúcares, jarabes y chocolates. En estos casos, las bondades del muesli se pierden en medio de la carga energética y calórica que en lugar de ayudar pueden favorecer el aumento de peso. No obstante, cuando el muesli es natural, sus beneficios son inmensos.
Si está elaborado a base de cereales integrales, frutas, frutos secos, germen de trigo o nutrientes similares, el preparado, además de delicioso es fuente importante de fibra natural. La alta presencia de ácidos grasos poliinsaturados, minerales y vitaminas, hace que este plato sea de lo más recomendable para empezar el día con energía.
De hecho, en una sociedad marcada por un ritmo frenético en el que muchas personas se saltan el desayuno, constituye una alternativa rápida y saludable para poder afrontar la jornada con fuerza. Y es que limitarse a un café o zumo por las mañanas lo único que hace es fomentar el abuso a la hora de las comidas, las cenas tardías y abundantes y todo ello se traduce en digestiones pesadas que, a la larga, derivan en indeseables incrementos de báscula. De ahí la importancia de equilibrar la alimentación empezando por las primeras horas del día.
El muesli, precisamente, es un alimento altamente nutritivo pero también sumamente equilibrado. Otra ventaja, además, es que se puede encontrar preparado y combinadocon una gran cantidad de ingredientes en forma de copos, snacks, frutas, fórmulas vitaminadas…Lo único que hace falta es prestar atención a sus componentes para asegurarse que la proporción de azúcar no es excesiva.
Otra posibilidad es la de prepararse el muesli a gusto. De esa forma se puede sustituir el azúcar moreno por miel, fructosa o pasas; añadir semillas de lino, pipas de girasol o calabaza o, por qué no, copos de castaña…Las opciones son infinitas.
A nosotros, en Urrutia, nos gusta utilizar este completo alimento en algunas de las recetas como son nuestras larguetas con muesli. Esponjosas lenguas elaboradas con aceite de oliva y con todo el sabor de un muesli natural y ecológico. Para que el aroma sea auténtico. Puedes tomarlas cuando más te apetezcan porque resultan muy digestivas pero si lo haces por la mañana nunca más querrás saltarte el desayuno!
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