Nada mejor que empezar el día con un buen desayuno. Aunque es cierto que muchas personas todavía tienen dificultades para incorporar este ritual alimenticio en su rutina, los expertos nutricionistas no hacen más que repetir la importancia de comenzar el día con energía. Pero no vale cualquier cosa.
Solo un buen desayuno puede ayudar a evitar problemas de hipoglucemia. De ahí que no resulte tan aceptable dedicarse a incluir solo biscotes con un café sorbido con prisas o bollería industrial. Ninguna de estas fórmulas resultará beneficiosa ya que provocarán un estado de ansiedad a media mañana que llevará al picoteo innecesario de refrigerios ricos en hidratos de carbono. Es crucial realizar una combinación sensata de alimentos para controlar los antojos y poder tomar decisiones alimenticias más acertadas durante el resto del día.
Por este motivo, para que sea saludable y equilibrado, debe incorporar proteínas ya que estas ayudan a mantener los niveles de azúcar estables. Se pueden encontrar en los lácteos y frutos secos, por mencionar algunos alimentos y son indispensables para el correcto crecimiento, desarrollo y reparación de todo el cuerpo. Un correcto desayuno debe incluir además hidratos de carbono, que son la principal fuente de energía. Cereales integrales, copos de avena o frutas son algunas de las opciones más populares aunque no son las únicas. La fibra y las grasas saludables también son claves. De hecho, ayudan a asimilar los nutrientes solubles en grasa y mantienen estable el sistema hormonal. Frutos secos, aceite de oliva, semillas de chia, lino, calabaza, girasol…el abanico es de lo más amplio.
En Casa Urrutia, elaboramos dulces sabrosos y sanos que contienen muchos de estos ingredientes para que el pistoletazo de salida de una larga jornada sea mucho más llevadero. Galletas con sésamo, bizcochos de avena, magdalenas con aceite de oliva, pasteles integrales…Formas esponjosas y jugosas elaboradas artesanalmente para no perder ni una pizca del aroma tradicional más saludable. Combínalos con un vaso de leche, un zumo natural y una pieza de fruta para que cuentes con todos los nutrientes necesarios para un día lleno de fuerza y, por supuesto, de sabor.